18 Sep Invertir en Justicia
El término “Justicia” tiene muchas acepciones. Podemos hablar de ética, moral, virtud, y otros… Pero hay uno con el que yo tengo una estrecha relación, que es el derecho y todo lo que lo envuelve. Las definiciones de derecho son amplísimas y numerosísimas , así que no entro en ello, porque no es el objetivo de este post. Quiero hablar de INVERTIR EN JUSTICIA, no sólo por parte de las autoridades, sino TODOS Y CADA UNO DE NOSOTROS.
Vivimos en un mundo lleno de reglas, y normas, y existe un lugar (por muchos temido) que es el juzgado. El sistema judicial, lo que vulgarmente llamamos “la justicia”.
Los abogados somos conscientes de la situación de muchos de nuestros juzgados, que actúan de forma lenta debido a que están colapsados. Con absoluta honestidad, muchas veces los abogados tenemos en cuenta esta circunstancia para asesorar a nuestros clientes, y el cliente toma decisiones considerando el colapso del sistema judicial. Lo cierto, es que, es una pena que el sistema por el que podemos hacer valer nuestros derechos, a veces nos provoque la situación contraria, una clara indefensión.
La justicia vista desde mi prisma de abogada tiene muchas derivadas, si bien, lo que quiero transmitir en este artículo, es que la justicia es de todos, y es responsabilidad de todos. Soy parte de este mundo de pasillos, de esperas, de togas, de resoluciones, de plazos y te digo: “Todos somos nuestra justicia. Invirtamos en mejorarla”.
Los juzgados son edificios que se colapsan de casos, de problemas legales, y todo bajo los escasos medios que tienen y el trabajo de los funcionarios que están sobrepasados.. Debemos hacer una reflexión importante sobre la situación de nuestra justicia, y es , ¿ que he hecho yo para invertir en mejorar la justicia?
Muchas veces la actitud ante los conflictos es fundamental para conseguir soluciones eficientes y poco costosas. La honestidad de las partes ante los problemas legales puede permitir que las soluciones sean más fáciles. Las discusiones y el tiempo perdido en encontrar un buen resultado, conlleva a veces que las partes se enrocan en venganzas y rencores que no permiten la solución, y terminan enfrentados en los tribunales.
Cualquier persona que tiene que gestionar un problema legal debiera hacer la reflexión sobre el alcance de este, y de cual es la mejor de las opciones para sus intereses.
Obsta decir que la decisión de que un abogado inicie un procedimiento judicial, o una negociación, siempre es del afectado por el problema, sin embargo, nosotros como abogados tenemos una responsabilidad en el asesoramiento de los clientes, y ésta se llama HONESTIDAD.
Si nuestro cliente no tiene razón y se lo decimos y a pesar de ellos llevamos un procedimiento judicial, el resultado es claro, hay pérdidas: se gastan recursos del cliente (honorarios de abogado y procurador y en su caso las costas), se gastan recursos del sistema judicial y se gasta (un bien que muchas veces no es apreciado) el tiempo de todas las personas que intervienen.
¿Cuál es el resultado? El que efectivamente el abogado había dado antes de iniciar el procedimiento: PIERDE EL CLIENTE, EL ABOGADO, LA JUSTICIA Y TODOS.
Con el ejercicio de mi profesión quiero que mi labor sea un pequeño granito de arena para que no existan estas pérdidas de valor de nuestra justicia. Mejorar la justicia está en manos de todos, no me refiero a que hagamos una recolecta (crowfunding), me refiero a que la inversión puede ser de forma pasiva, con la toma de decisiones para que los resultados óptimos y mejores puedan ser tomados de otra manera.
Con esto no quiero decir, que renunciemos a acudir a la justicia cuando lo consideremos, faltaría más. Simplemente lanzo la reflexión, sobre la responsabilidad de cada uno de nosotros en el uso de los medios que tenemos para solucionar los problemas, y con ello el sistema judicial.
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