NEGOCIAR , EL SENTIDO COMÚN

NEGOCIAR , EL SENTIDO COMÚN

El estado de Alarma esta provocando situaciones anormales en la actividad de muchas empresas. La situación ha llevado a la paralización no sólo de la propia actividad de las empresas, sino una inmovilización de la cadena de producción o de suministro de los servicios externalizados.

A todos, seamos empresarios, emprendedores, autónomos, así como trabajadores, nos preocupan las consecuencias de esta situación, es lógico, ya que no sabemos que efectos puede generar esta paralización de todo.

El incumplimiento de un contrato de un solo eslabón de esta cadena genera un efecto de bola de nieve que puede tener consecuencias ( seguro que las tiene) en la producción y resultados de nuestra actividad. El incumplimiento de un contrato genera una cadena de incumplimientos. La cuestión es cómo tratamos estas situaciones.

En primer lugar, y siendo honesto con el mercado y con la actividad de nuestra empresa, debemos analizar y tener claro, cuáles han sido las causas de que nosotros incumplamos, las cuales pueden ser variadas:

  1. La existencia de un incumplimiento previo de un agente externo, que ha afectado a la actividad, que nos imposibilita cumplir el contrato.
  2. La existencia de limitaciones en nuestros recursos para el cumplimiento, en este caso seria la falta de mano de obra, por el cierre obligatorio y total de las empresas ( me refiero a los 15 días de ceses de actividad por el que se estableció el permiso retribuido del confinamiento).
  3. La imposibilidad total del cumplimiento por la aplicación directa de las medidas del estado de alarma. En este caso, podemos entender que seria aplicable a las empresas que se han visto obligadas a cerrar , que prestan servicios al público, o que su actividad es principalmente presencial.
  4. Por decisión propia, como una previsión de ahorrar liquidez. A pesar de ser capaz de cumplir, unilateralmente has decidido incumplir, en previsión a la situación.

Las causas que han generado el incumplimiento son importantes, ya que las soluciones serán distintas, y sobre todo, porque a la hora de intentar reconducirlo, esas variables nos ayudaran a hacer las previsiones necesarias.

Una de las soluciones es la vía que más me interesa y me gusta porque responde AL SENTIDO COMUN. Negociar. Todos estamos viviendo una situación excepcional, e iniciar una negociación permite ahorrar costes, tiempo y preocupación. Un proceso en el que se ponen los intereses contrapuestos de las partes, para llegar a un punto intermedio de acuerdo, puede ser una vía más rápida, y eficiente de lo que imaginas.

Otra de las soluciones, es una figura jurídica, que ahora se está haciendo más presente en los artículos específicos del sector. Se denomina la cláusula  REBUS SIC STANTIBUS, que viene a significar “Estando así las cosas”. Es una doctrina, no está regulada en ninguna norma. Es una figura por la que la jurisprudencia estima que pueden existir situaciones excepcionales que requieren de una revisión y/o modificación de los términos de un contrato, respondiendo a que el equilibrio de las prestaciones entre los que lo firman se reestablezca.  La aplicación de esta figura permite instar una modificación de los términos del contrato para reestablecer el equilibrio entre las partes. La aplicación de esta clausula se deriva de un procedimiento judicial, es decir, que no es aplicable unilateralmente.

Por último, y encontramos una no solución ( de final) que es resolver los contratos que nos veamos incapaces de cumplir. Terminar un contrato de una forma unilateral puede tener cabida en los supuestos que regule el propio contrato, pero igualmente la imposibilidad de cumplimiento es en sí una causa licita. Lo que es importante de estas resoluciones,  son las consecuencias. La situación actual es excepcional, y es una causa de FUERZA MAYOR, y ello nos permite evadir las obligaciones del pago de daños y perjuicios que pudiera generar a la otra parte la finalización del contrato.

Como veis, las soluciones/no soluciones que os he expuesto ante la situación actual, son varias, si bien, por muy grave que sea la situación, quiero que aboguemos por aplicar el SENTIDO COMUN, que nuestro derecho lo tiene. ¿ Cual crees que es el sentido común de las cosas? Como he dicho en otras ocasiones, si yo pierdo, no voy a imponer que pierdas, pero al menos no te enriquezcas injustamente de esta situación. Como verás la negociación puede acumular las otras opciones( en cierto sentido), y el sentido común me dice, que, en la medida de lo posible, y siempre que exista buena fe ( no haya trucos ni intenciones oscuras), el negociar es la solución.  

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